Ni de cAbd al-Malik ni de En Suau - Banys de l'Almirall
Ni de cAbd al-Malik ni de En Suau
Otra identificación errónea, y ésta totalmente aceptada –si bien no afecta directamente al problema cronológico–, es la que lo confunde con el Bany d'En Suau evocado en los antes mencionados versos (2.650 y siguientes) del Espill de Jaume Roig, compuesto en 1459-1460:
"Sovint anava
de nit al nou
bany d'En Sanou
o d'En Suau
en lo Palau"
Con el precedente de Orellana, quien se basó en la relativa proximidad del Baño del Almirante al palacio arzobispal –el Palau por antonomasia–, Chabás y Sanchis Sivera contribuyeron también a difundir dicha identidad, asumida por los autores recientes. Y todo ello a pesar de una amplia evidencia, proporcionada por documentos de archivo datados esencialmente entre 1380 y 1418 –entre ellos el antes comentado proceso de Joan Suau contra Tomasa de Montpaó–, que localizan de forma explícita el Bany d'En Suau cerca del mercado de la ciudad, a la entrada de la calle de la Bolsería, junto a otros establecimientos –un horno y varios obradors– que tenía allí el mencionado Joan Suau.
La alusión al Palau de Jaume Roig puede deberse a dos razones. Por un lado, es posible que se trate de una alusión simplificada, por exigencias de la versificación, a lo [carrer d'En] Palau: una calle situada, precisamente, en las inmediaciones de la Bolsería. Por otro, lo que quizá es más probable: si admitimos un cambio de puntuación que vincule la expresión en lo Palau con el verso siguiente, en lugar del anterior, tendríamos: En lo palau / al despullar / véreu ballar... De este modo el sentido se modifica, introduciéndonos ya la escena en la que la protagonista se desnudaría en el interior de un palau, palabra que, como es bien sabido, tiene también el significado de habitación o sala grande: un documento relativo al baño de la morería de Xàtiva, del año 1503, menciona expresamente el "palau calent".
Todas estas identificaciones documentales erróneas, en definitiva, han viciado la práctica totalidad de las observaciones publicadas hasta la fecha sobre el edificio del Baño del Almirante. Ése era el estado de la cuestión en el momento de emprenderse los trabajos de documentación arqueológica y archivística llevados a cabo entre 1991 y 1993 al objeto de preparar la prevista restauración del inmueble.